julio 31, 2011

Variación y más cambios inesperados

La vida aveces es predecible y aveces es sorprendente. Me ha sorprendido tantas veces... y yo misma me sorprendo de lo que pasa a mi alrededor... y de lo que hago o hacen sin pensar tanto... de eso que haces con el corazón.

Como cuando escuchas la variación 18 de Sergei Rachmaninoff... la primera vez que la escuché me sentí completamente viva. Creo que fue mientras vi Pide Al Tiempo Que Vuelva... o en una clase de ballet... no recuerdo exactamente cuando pero era una niña. Después la escuché en otras pelis como El Día de la Marmota, cuya versión pasa a Jazz chidérrimamente.

Definitivo Variación XVIII: Andante cantabile de Rapsodia sobre un tema de Paganini es de mis rolas favoritas... me consta que la música sin letra hace que escuches a tú alma y logres volar.



Hoy siento una gran oportunidad... no sé cual será el resultado, pero estoy segura de que hoy es mi día de suerte. Desperté y escuché esta canción. Después de un circo emocional y mental, me encontré $100.00 en la calle e iban volando hacia mi. En unos momentos me lanzo a hacer una propuesta importante... con una sonrisa por delante con esta rola y otras más en mi mente.

Y sí... me lanzo al abismo cuyo fondo todos podemos comprender al sentir un beat, una nota o imaginar un beso... y yo, voy a arriesgarme... voy por más que amor.

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