diciembre 21, 2010

Eclipse por un sueño hiperactivo

La Luna es más que mi observadora desde niña y en esta noche de eclipse lunar pedriría un deseo porque muchos que le he platicado se han cumplido y sé que tal vez cometería un abuso si pido otro... dicen que los eclipses anuncian el inicio o término de un ciclo, que el calendario Maya apunta al 21 de Diciembre y curiosaMENTE esta fecha se espera para el 2012... sólo me consta que las personas búhos amamos la noche... y los hiperactivos a veces, no dormimos ni de día.

Hace tiempo, como año y medio, tuve un sueño muy extraño y vívido en donde veía a La Luna como se ve hoy... no sé si sea casualidad, pero en ese momento no tenía ni idea de la profesía Maya... y menos de lo que decían del 2012... es más, desde que recuerdo no me interesan mucho los temas apocalípticos, no los busco, pero de una extraña manera se me presentan... en películas, en documentales, en relaciones, en pláticas... desde que recuerdo se está terminando el mundo, y en mi sueño pasaba algo similar como efecto de una Luna muy brillante y rojiza. Para más casualidad o mensaje onírico del subconsciente, una año atrás del sueño aproximadamente, en febrero hubo Luna Roja y la vi.

Desde que vi un programa de televisión infantil, donde una preadolescente le hablaba al "Hombre en la Luna" me dio curiosidad hacerlo... desde niña soy hiperactiva, sólo que en aquel momento, ni yo decía muchas de mis preocupaciones y también, aprendí a hacerme la dormida como estrategia nocturna... no sé si me hice o nací noctámbula, pero dormía poco por asustadisa y con el tiempo le tomé gusto a la noche... le platico a la Luna desde los 16 años, pero me convertí en voyerista desde que recuerdo...

Sé que es el símbolo más femenino de la naturaleza; que su energía afecta la marea y se me hace lógico que afecte a los seres vivos... El mito de los hombres lobo o el adjetivo coloquial "lunático" desde que recuerdo me encantan... y me estremecen. Es como que muy morboso, porque me da miedo y a la vez me da curiosidad... creo que mi hiperactividad tiene que ver con mi curiosidad y mi imaginación.

Las primeras desveladas que recuerdo es imaginando que un vampiro vendría a morder mi cuello si me dormía... también imaginaba algún personaje de terror en la ventana y muchos años esperé despierta a los Reyes Magos, pero de las que más tengo presentes son levantándome de la cama con mis hermanos, jugando a no hacer ruido, arrastrándonos como soldados por el piso, hasta llegar a ver lo que mis padres vieran en la TV y afortunadamente, eran programas de misterio o de suspenso. También recuerdo las noches en que mi mamá nos llevo de paseo nocturno...

Una vez mi mamá me contó un cuento azteca en el que se lanzó a un conejo y cuando hay Luna Llena se aprecia su silueta... lo ví muchas veces y me imaginaba que habría sentido aquel conejo al llegar hasta hallá.

Cada que habia una reunión o fiesta de adultos, nos desvelábamos al parejo... y aprendí a hacerme la dormida las veces que jugamos Turista u otro juego de mesa si mis padres salían después que según ellos nos dejaban dormidos. Es chistoso como los niños pueden ser igual o más astutos...

Antes de platicar con la Luna me escapaba por la noche a ver la TV sin volúmen en la sala... hasta la fecha lo hago, porque estoy convencida que no quiero esa invasión a mi intimidad, una reflexión que me regaló un profesor de economía hace años; estoy segura que de tener un monitor en mi recámara no dormiría...

Cuando me regalaron un radio portatil, aprendí a escuchar música. Me gusta bailotear e imitar pasos desde que recuerdo sólo con ritmo, también he tomado clases para sentirla, pero sin ese radio, no sé que hubiera hecho tantas noches de vigilia... fueron madrugadas enteras de escuchar diversas estaciones, bailotear algunas canciones, aprenderme estribillos y también, imaginar más sensaciones...

También llegué a leer a escondidas con una lámpara de mesa. Una noche mi papá me cachó, y fue tal su regaño que me vi orillada a leer bajo la luz de la Luna... funcionó sólo una noche; después recurrí a las velas... pésima elección. Se incendió la cortina y con ella todo lo que tenía en mi buroe... hasta la fecha en mi casa me hacen bromas como llamarme "Pompeya" cuando se acuerdan que apagué un incendio con tres vasos de agua. Hay libros que me han atrapado de noche a día y otros me han aburrido al grado de hacer lo que morfeo... igual que algunas películas o programas de TV.

Cuando comencé a fumar seriaMENTE abría la ventana de mi recámara a puerta cerrada, con mucho cuidado de que no rechinara el aluminio y después de tan minucioso trabajo asomaba la mitad de mi cuerpo. Mi ventana daba a un parque muy sencillo, y entre la luz de Luna y un faro descuidado vi a varias parejas dándose besos, borrachos platicando y discutiendo, sombras en las cortinas de otros departamentos y mientras fumaba, imaginaba más sensaciones y sentimientos...

No recuerdo que hacía esa noche... aveces en una madrugada, si salía de parranda o me quedaba en espera de sueño, fumaba, escuchaba música, leía, bailoteba y hasta escribía... pero esa noche, llegué medianamente alcoholizada. Recordé que tal vez existiría un hombre, un conejo o alguien que quisiera escuchar mis sentimientos, mis anhelos, mis imaginaciones... me sentía tan dolida y no quería que me escucharan llorar porque una semana atrás mi hermano me había abrazado escuchando lo que me dolía totalmente alcoholizada y no sentía que fuera necesario volver a pasar por una situación similar, así que con la mente comencé a decir todo lo que pensaba o lo que sentía hasta que caí dormida.

Con el tiempo comencé a preguntar, a reflexionar y hasta a pedir deseos esporádicamente... La Luna se convirtió en mi confidente además de mi acompañante, testigo o cómplice de muchas experiencias... hoy me regala un deja vuh, muchos recuerdos y más fé en cumplir anhelos... me enteré del eclipse justo minutos antes de que iniciara...

Ya no aguanto como antes las desveladas y cada vez me acerco más al requerimiento de 8 horas diarias... es la primera vez en mi vida que veo un eclipse lunar completo... no es la primera vez que siento una noche etérica... me consta que los lunáticos somos muy sensibles... las mujeres y la Luna tenemos una relación más allá del ciclo menstrual... no sé que signifique esta noche porque no soy adivina ni leo mentes y no me gustan los enfoques fatalistas... me considero intuitiva y sé que en este momento inicia, por lo menos en mi vida, el trabajo de otros sueños por cumplir... sólo que ya no soy tan hiperactiva y sigo desvelándome sin hacer tanta vigilia... diario en mi mente hay un sentimiento que la calla... es como un eclipse por un sueño hiperactivo.

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